15 Noviembre

Las 5 a.m. llegan muy rápido. Nos despertamos, preparamos todo rápido y salimos pitando hacia el aeropuerto para evitar los monumentales atascos de entrada en BBAA. Nos toca esperar en la terminal como 2 horas hasta que montamos en el avión. Por lo menos hemos conseguido asientos en la salida emergencia y son mas amplios. Esto significa 3 horas de vuelo más o menos agradables. Llegamos a El Calafate y nos esperan para llevarnos al hotel. Nilo, nombre del responsable de llevarnos, se aventura y, como somos españoles (bueeeno….vale…) sabe de que equipo de fútbol somos. Del mismo que le gusta a el…..¡¡El rayo vallecano!! En fin, risotadas varias y llegamos al hotel. Nos encargamos de apuntarnos a un par de visitas: Estancia 25 de Mayo (una granja) y el Black Ice. Ya veremos que es esto.


La estancia incluye explicaciones varias sobre la estancia, demostración de esquila, piscolabis a base de cordero y vinito y una cena con parrillita de carne variada. El tipo que nos presenta la estancia es un cachondo, nos reimos mucho y encima se parece a….¡¡Mar-CIAAAAAAAAAAAL!! Ruiz Escribano (‘pa servirles’). Termina la visita con un vídeo antes de entrar en el salón para degustar la cena. Atención exquisita, ambiente agradable y comida….Co-Jo-Nu-Da. Termina con show cantado y bailado y al hotel que mañana nos espera el Big Ice.